Jon Karla y Jorge ya han cumplido el primero de los hitos de su aventura. Han completado las 18 etapas de la Vía Francigena, llevan más o menos 448 kilómetros en sus piernas y ahora encaran la Via Augusta di Mare. Echando la vista atrás a lo que han pasado en estos días, Jon Karla dice sentirse decepcionado. «Esperaba que fuera una vía mejor señalizada, que los caminos fueran más bonitos y representativos de la zona y no ha sido así», asegura. A la hora de hablar de su experiencia con la gente piensa que la mayoría no conoce la vía y son muchas las personas que «pasan del peregrino y no le ayudan». «La sensación es de abandono, de que no les interesa en absoluto», asegura. Además, señala que hay poco respeto al caminante por parte de l@s conductores: «Pasan pegados a ti…. Ha sido peligroso y ha habido tramos que lo hemos pasado mal». Jorge hace una valoración muy parecida: «Nos han vendido la imagen de la Vía Francigena idílica y en las etapas que hemos hecho solo hemos tenido un día de camino disfrutando de la Toscana. El caminar no fue disfrute, fue caminar porque tocaba hacerlo», sentencia. Sin embargo, si algo tienen que valorar es su forma de sobrellevarlo: «Lo hemos pasado bien por lo que vamos haciendo nosotros y la manera de apoyarnos, pero la Vía no es para disfrutarla mucho». A la hora de aventurar lo que les viene por delante tienen claro que les esperan otras 12 etapas de incertidumbre en las que esperan que les sorprenda para bien.
Desde tierras italianas Jon Karla no se cansa de repetir la necesidad de apadrinar kilómetros. Hasta ahora han participado 95 personas que han adquirido 461 kms, y la recaudación asciende a 2.309,24 €. Se pueden apadrinar kilómetros, con la cantidad que cada cual estime, en esta misma web o en las siguientes cuentas:
LABORAL KUTXA ES73 3035 0429 09 4290007563
KUTXABANK ES88 2095 3175 17 10918675635.
ETAPA 15 S. MINIATO ALTA – CAPANNORI (33KM), jueves 21 marzo
«Qué frío hemos pasado esta noche!!! Como rebajamos el precio en el monasterio en el que hemos dormido, nos nos han puesto la calefacción y hay que ver el frío que hemos pasado. Madre mía, parecía aquello una mazmorra! Nos hemos metido en la cama con el saco y dos mantas y no nos podíamos ni mover porque entraba un frío…. ¡Era horrible!
La ruta no ha tenido mucho misterio. El paisaje ha sido muy parecido al de días anteriores, pero con la diferencia de que hemos pasado por varios pueblos en los que poder parar. Hemos pasado miedo porque nos ha tocado un tramo de carretera y no había arcén y un camión nos ha dado un susto. En Altospacio el albergue estaba cerrado por reforma y nos querían alojar en un hostal que estaba en reformas pero tenía una habitación sin tocar entre lo derruído por la que nos querían cobrar 50E la noche. Obviamente hemos dicho que no y tras preguntar nos hemos marchado hasta Capannori, a 10 kilómetros, que en la biblioteca de Altospacio nos han indicado que estaba bien. Al llegar nos ha atendido de maravilla un chico. Era el típico albergue del Camino de Santiago, con buenas instalaciones, charleta con quienes lo llevan y bien equipado. ¡Nos hemos llevado una gran sorpresa!»
ETAPA 16 CAPANNORI – LUCCA (8 KM), Viernes 22 marzo
«Hoy teníamos una etapa corta porque ayer avanzamos 10 kilómetros más para dormir. Hemos dormido de lujo en el Ostelo la Salana y nos ha costado mucho levantarnos porque era una gozada estar durmiendo en cama cómoda con sábanas limpias y buena temperatura. Pero… hemos venido a caminar y eso es lo que hemos hecho. A Lucca hemos llegado para las 10.30 y hemos encontrado pronto el albergue gracias a la ayuda del chico del albergue de Capannori que había avisado de nuestra llegado. Nos han permitido dejar las mochilas allí y nos hemos cogido un tren para ir a Pisa para que Jorge lo conociera. Hacía calor, había mucha gente, hemos visto la zona turística y hemos regresado a Lucca a cenar. Ésta es una ciudad amurallada en la que no dejan entrar coches y la gente se mueve mucho en bicicleta, algo que no habíamos visto hasta ahora»
ETAPA 17 LUCCA – PIETRASANTA (34KM), sábado 23 marzo
«Temperatura buena y cielo despejado. Hemos empezado a utilizar una app que nos había enseñado una peregrina de la Vía Francigena que nos ha hecho subir un puerto alto para bajar por donde nos indicaba Google maps… ¿Qué hemos conseguido? hacer más kilómetros. Conclusión: no la vamos a usar más. Ha sido una etapa dura por ese puerto, había bastantes repechos y en las zonas de asfalto ha sido peligroso y un par de coches ya nos ha dado un susto… En Italia no respetan al peatón nada de nada, te pasan pegados.. Tenemos ganas de acabar estas etapas porque está siendo peligroso. Pietrasanta está animado porque es sábado y hace muy buena temperatura. Nos hemos alojado en un albergue pegado a un convento muy coqueto y que está bien, la verdad»
ETAPA 18 PIETRASANTA – SARZANA (33KM), domingo 24 marzo
«Día estupendo, con poco tráfico. Hemos empezado a notar el cambio de paisaje. Hay muchas empresas de corte y tratamiento de marmol y muchas montañas de las que se saca. Más adelante ya hemos ido viendo por el paisaje que nos vamos acercando a la costa. Hemos ido por un arden amplio y caminado a gusto. Los kilómetros y el calor han pesado porque era una etapa muy larga. Hemos llegado a Sarzana muy cansados y en el pueblo había muy poca gente. Nadie sabía del albergue de peregrinos e incluso hemos hablado con los bomberos para que nos dejaran alojar en su base, pero era una responsabilidad para ellos y no lo han hecho. Al final, con ayuda de Agurtzane, mi mujer, hemos localizado un apartamento en La Spezia que nos va a permitir descansar bien que mañana la etapa parece dura también»